miércoles, mayo 31, 2006

Una de lingüística: Aprendamos chileno


Si tomamos en cuenta que, en este siniestro giro que ha dado la política latinoamericana, Chile destaca por lo tangible de sus resultados e incluso se muestra a la vanguardia con la primera mujer presidente por estas tierras en Michelle Bachelet, no es tarea inútil adentrarnos un poco en los modismos chilenos.
Realmente, más allá de cualquier comentario, este completo Diccionario de chilenismos será su principal compañero en la aventura.
Sin embargo, es imposible obviar esta extraña fijación de los chilenos de relacionar el sexo con la dentadura, así tenemos, por ejemplo:
  • Botar el diente de leche: Cuando tienes por primera vez sexo
  • Botar la muela del juicio: Hacer el sexo anal por primera vez

Entre las estadísticas destacadas tenemos que al menos 313 de las definiciones se relacionan de alguna manera con la mujer, 109 nueve con el órgano sexual femenino y 30 con el trasero (especialmente femenino). Como contraparte, se tiene que apenas 3 definiciones refieren al exdictador Augusto Pinochet y al pinochetismo.

Ahora sólo será cuestión de su curiosidad personal para lograr esta meta tan acorde con las realidades geopolíticas de nuestra región: aprender chileno.

Un día imaginario en la ciudad de Caracas: 6:40 am, El informe del tiempo


Condiciones atmosféricas: anárquicas
Temperatura máxima: 40° C-104°F
Temperatura mínima: 15° C-59°F
Temperatura promedio: en el intervalo entre 15° C-59°F y 40° C-104°F, incluyendo los extremos
Nubosidad: total, parcial y ninguna
Visibilidad: ver nubosidad
Ropa y accesorios adecuados: ropa fresca, suéteres, bufandas, paraguas, sombrillas, zapatos antirresbalantes, tacones altos, bloqueador solar, guantes y cualquier otro que se adapte a cualquier clima.

Otras consideraciones útiles para prepararse para el clima en la ciudad de Caracas:
  • Si determinada actividad depende de un clima soleado lloverá y, pese a que seguramente ya estará acostumbrado y logrará llevar a cabo dicha actividad, llegará tarde, le tomará el doble y perderá cualquier tipo de disfrute.
  • Pero, si desea con todas sus fuerzas que llueva para eximirse de algún deber, será un día soleado. Nunca cuente con el tiempo como aliado, ni real ni imaginario, en Caracas.
  • Si el desarrollo, reparación o mejoras de la infraestructura vial dependen de un día soleado, sin duda lloverá y, de ser posible, hará imposible el trabajo. Llámese carretera, ruta, vía de contingencia o trocha quedará intransitable.
  • Si ve una nube gris sobre su casa temprano en la mañana y se alegra cuando ve hacia la zona donde se encuentra su trabajo ya que hay un sol radiante, no se entusiasme en exceso, probablemente la nube lo perseguirá. Familiarícese con las “Las leyes de Murphy”
  • Simón Bolívar dijo "Si la naturaleza se opone lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca" después de un brutal terremoto, pero recuerde el triste final de Bolívar exiliado en Santa Marta, Colombia. Aprenda de la Historia. Sea humilde frente al clima, adáptese y no complique más su vida.

Un día imaginario en la ciudad de Caracas: 6:08 am Un títular que faltaba...


EL NUEVO PAÍS:
Titular:Delirio sobre el Chaverazo
sumario: Hugo se fuma una lumpia y decreta mandato eterno

martes, mayo 30, 2006

Una pequeña herramienta para determinar la efectividad de una historia


Sobre la película “El Código Da Vinci”, el crítico norteamericano Steve Rhodes, comentó: "Tanto si ha leído el libro, como yo, o incluso si no lo ha hecho, como mi esposa; eventualmente podrá entender la mayor parte de lo que ocurre entre las diferentes facciones en conflicto. Sin embargo, entender e interesarse son dos cosas diferentes".
Por nimio que parezca, esta simple afirmación nos permite descubrir uno de los elementos más importantes en una historia: su relevancia y su intensidad emocional, el cual me gustaría estudiar como el primero de una serie de tópicos del arte de contar historias que iremos revisando en el blog. Es a partir de la emoción desde la cual un autor logra hacer universal e incluso atemporal su mensaje.
Es trabajando con esto en mente con lo cual se logra una historia memorable.
Existen narraciones complejas, casi crípticas, que nos impiden conocer con claridad lo que ocurre. Pienso tal vez en las películas de David Lynch o en algunos de los relatos de William Burroughs.
Según el caso, ante esta maraña de eventos incomprensibles trataremos de utilizar complejas decodificaciones de los significados simbólicos o simplemente nos dejaremos fascinar por la particularidad de las situaciones.
Pero se trata de un interés más intelectual que humano.
En el otro extremo, podríamos colocar películas como “Arma mortal”, en las cuales, dada la suficientemente clara invencibilidad de los protagonistas, simplemente nos preguntamos qué pasará al momento siguiente y nos dejamos llevar por el vértigo de la acción. Casi siempre hay claridad en los eventos y las motivaciones de los personajes, pero, como se trata de estereotipos, poco puede importarnos su destino.
En la gama de grises que se encuentran rodeadas de estas dos tendencias, se encuentran los relatos que pueden ser claros en sus planteamiento, pero, a la vez, ofrecernos relevancia emocional. Películas como “In the bedroom”presentan conflictos que comprendemos (dos padres de avanzada edad pierden a su hijo) y al mismo tiempo se van acumulando otros datos, otras implicaciones, otras sensaciones y la conjugación de estos elementos nos afectan y permiten que la historia salga de sus límites estrictamente cinematográficos y ficcionales para ingresar a nuestra vida.
Tenemos entonces que, cuando sintamos duda con el desarrollo de alguna historia en la cual trabajamos, hay dos preguntas que es interesante hacernos:
1)¿Son claros los eventos que estamos presentando?
2)¿Invitan al lector/espectador a involucrarse en ellos?

La mejor forma de lograr la relevancia emocional es a través del desarrollo de los personajes, pero ese será el tema de una próxima entrega.

Un día imaginario en la ciudad de Caracas: 6:07 am, Los titulares de un país


EL NACIONAL
Titular: Presidente Chávez amenaza combatir la abstención con mandato perpetuo
sumario: La oposición prepara estrategias para contrarrestar lo que perciben como un letal atentado contra la democracia

EL UNIVERSAL
Titular:
Chávez: "Mandaré para siempre"
sumario: En su programa dominical "Aló, presidente", el primer mandatario nacional amenazó con prolongar indefinidamente su mandato si la oposición apela nuevamente a la abstención.

ÚLTIMAS NOTICIAS
Titular:
Si me juegan kikirigüiki se la calan...
sumario: Presidente Chávez advierte a la oposición que si se retira no hay quien le haga soltar el coroto

Diario Vea:
Titular: Hacia la consolidación de la revolución
sumario: El líder del proceso revolucionario, el comandante Hugo Chávez Frías, aconsejó ayer a los partidos de oposición que participaran en las elecciones presidenciales de diciembre porque de lo contrario escucharía la voz del pueblo y aseguraría su reelección indefinida.

lunes, mayo 29, 2006

Un parentesco literario: Javier Marías y "Virginia y tú"


Una semana después de haber releído mi relato "Virginia y tú" y a partir de unas conversaciones que tuve con Marta, encuentro un paralelismo entre la dinámica interna de mi relato con una de las mejores novelas que he leído: "Mañana en la batalla piensa en mí" de . No quiero establecer una comparación forzada, es simplemente un juego intelectual.
En ambos casos, el narrador reflexiona frente a un cuerpo inerte. Un cuerpo femenino sobre el cual, en vigilia, se extende un vínculo afectivo, amoroso, sensual, sexual. En ambos casos el narrador divaga con esta mujer como excusa, sus pensamientos van y vienen y, palabra a palabra, se va asentando una visión, casi diríamos una filosofía de vida y hasta de muerte.
Pero son las diferencias las que más me interesan, ya que no creo que haya simplemente azar. En el caso de la novela de Marías, la mujer esta muerta; Virginia sólo duerme.
Virginia es la esposa, la mujer de Marías es la amante.
El narrador de Marías es un hombre ya maduro, el mío es un hombre joven.
El desplazamiento para mi narrador genera dudas y contradicción, el de Marías es un hombre que se desenvuelve con la seguridad de contar con todo un continente como su patria.
En el tono del narrador de Marías hay cierto reproche, no hacia la mujer sino hacia su marido. En "Virginia y tú" se narra desde una conformidad militante.
Las diferencias arropan las similitudes, sin embargo, me es imposible no ver el vínculo. Un parentesco literario: secreto, accidental, no buscado, pero presente.
¿Será Virginia nieta de Javier Marías?

domingo, mayo 28, 2006

Un día imaginario en la ciudad de Caracas: 5:55 am, "Nuestro insólito universo"


TAG:Durante siglos, el mar ha fascinado a la especie humana con la multiplicidad de sus manifestaciones. Fuente de vida y esperanza para el futuro del hombre, el mar también encierra los más espeluznantes e inexpugnables secretos...

PRESENTACIÓN

Cierto domingo de mayo, Marta Hernández de Nieves, joven profesional, Gerente de desarrollo de nuevos negocios de una importante firma de seguridad informática, llegó al pequeño poblado de Chirimena con la intención de pasar una calma jornada playera.
Al final del día, después de horas expuesta a los benéficos efectos del sol y el agua del mar, Marta Hernández vio cerca del toldo donde reposaba con su esposo una extraña concha marina, cuya visión tornasolada la enamoró inmediatamente, conminando al esposo a que la tomara para llevarla de regreso a Caracas.
El día siguiente, Marta Hernández llevó la peculiar concha a la oficina y la colocó junto al teléfono de su cubículo. Sin pretensión alguna, la concha irradiaba sus colores de manera enigmática. Nadie podía imaginar los extraños y atemorizantes sucesos que comenzaron a desencadenarse desde ese preciso momento

(música de suspenso)

La primera llamada que se recibió en esta importante empresa de seguridad informática notificaba que un negocio prácticamente cerrado se había cancelado. Posteriormente se supo que un cliente fiel abandonaba la firma para irse con la competencia. Ya para el martes aparecieron el primero de los cinco apagones que afectaron brutal e irreversiblemente los servidores de la empresa.
Pero tal vez la gota que derramó el vaso fue que el domingo siguiente, a una semana exactamente de haber sido recogida la concha, Carlota, la inocente y alegre recepcionista, murió ahogada con un pedazo de hueso de la pieza de pollo frito que disfrutaba con su familia en cierta franquicia de la capital.
Preocupado por esta repentina racha de mala suerte, el presidente de la compañía de seguridad informática, un fiel creyente en artes y ciencias ocultas, convocó a cierto chamán aborigen famoso por sus trabajos corporativos para que dispensara una visita en la madrugada del lunes al malhadado lugar.
Nada más poner un pie en las oficinas, el chamán tembló violentamente como respuesta a las vibraciones negativas que percibía y de su boca comenzó a brotar espuma blanca. Justo cuando el presidente de la compañía pensaba que "peor había sido el remedio que la enfermedad", el chamán volvió en sí.
Y, pese a que nunca había estado en la empresa, caminó con paso decidido hacia el cubículo de Marta Hernández, tomó la concha marina y la empuñó hasta convertirla en polvo. Sin dar mayores explicaciones, el chamán confirmó que su trabajo estaba hecho.

(música incidental)

Minutos después de comenzado el turno matutino de ese lunes, un importante cliente se apersonó en las oficinas para firmar un contrato milmillonario. Igualmente se supo que cierto soborno que se había pagado a un juez para que brindara una decisión favorable en una demanda contra el gobierno había dado resultado.
No fue sino hasta el mediodía cuando Marta Hernández comenzó a preguntar por su desaparecida concha marina. Fue de cubículo en cubículo, persona a persona, interrogando detenidamente acerca del paradero de su preciada concha. Cuando le tocó el turno al presidente de la compañía, éste le respondió con un sepulcral...

(música de suspenso)

silencio...
Pese a que todavía hoy nadie puede asegurar a ciencia cierta la relación entre la concha marina y la mala suerte en esta compañía de seguridad informática, ni la relación entre la desaparición de la concha y el retorno a la normalidad, los directivos de la empresa informática han tomado, con salomónica sabiduría, una decisión tajante:

(acordes agresivos)

queda terminantemente prohibido a todos los empleados ingresar en la compañía con cualquier tipo de souvenir vacacional, por pequeño que éste sea.

Un día de playa: el regreso



Venimos llegando de Chirimena, estuvimos con Martín, Mónica, José Antonio y Evelyn. Tengo algunas historias pendientes pero entre el agua del mar, las intermitencias del sol e incluso la lluvia, como siempre, me han dejado maravillado, por lo que en la Caracas-Guarena recordé esta canción, coincidencialmente también de Serrat, que me gusta mucho.


Maravilla
Vamos mengana usar la maravilla,
esa vislumbre que no tiene dueño.
Afila tu delirio,
arma tu sueño
en tanto yo te espero en la otra orilla.
Si somos lo mejor de los peores
gastemos nuestro poco de albedrío.
Recupera tu cuerpo
y hazlo mío
que yo lo aceptaré de mil amores.
Qué maravilla
de maravilla
la maravilla.
No hay pie de rey que mida
la maravilla.
Ni balanza que pese
la maravilla.
Qué maravilla
de maravilla
la maravilla.
No hay dinero que compre
la maravilla.
Y ya que estamos todos en capilla
y dondequiera el mundo se equivoca
aprendamos la vida
boca a boca
y usemos de una vez la maravilla.
Qué maravilla
de maravilla
la maravilla.
No hay pie de rey que mida
la maravilla.
Ni balanza que pese
la maravilla.
Qué maravilla
de maravilla
la maravilla.
No hay dinero que compre
la maravilla.

Letra de J.M. Serrat y Mario Benedetti
Música de J.M. Serrat

viernes, mayo 26, 2006

Un bautizo literario















Venimos del bautizo del libro "De la urbe para el orbe", recopilación de los trabajos presentados en la semana de la nueva narrativa urbana. Desde que supe el título recordé la bendición urbi et orbis y quise regodearme en la crítica.
Pero resulta que, a medida que pasa el tiempo, me he sentido más cómodo con él.
Ha sido una verdadera celebración de la literatura. No comparto la idea del prologuista, Luis Barrera Linares, acerca de nuestra identidad como grupo o la necesidad de ella, pero el simple acercamiento, el conocimiento, la identificación con los pares, es un ejercicio de sensibilidad e intelectualidad interesante.
Desde finales de 2003 no tenía la emoción del bautizo d eun libro. Salvador Fleján se me acerca y me dice un par de veces que le gustó mucho "Virginia y tú". Yo sonrío y repaso el cuento y me digo lo que siempre me repito al pensar en los textos entrañables: ¡cuántas cosas tuvieron que pasar para poder escribirlos!
Los cuentos terminan siendo una especie de fotografía, de balance general de la vida, las lecturas, las inquietudes y las ambiciones del momento cuando se escriben.
Llego a la casa y le comento a Marta que me he quedado prendado de la expresión de Antonio López Ortega, quien calificó a Virginia como "un hermosísimo personaje", ella allí, durmiendo, inocente de las divagaciones de su esposo. Virginia. Y Virginia, sin lugar a dudas, es mía.
¡Gracias a Dios por la literatura!

Una de piratas



















Recién llegado de escuchar las noticias de magistrados defenestrados, acusaciones que van y vienen y la desenfrenada lavada de trapos sucios en la política revolucionaria venezolana, recordé esta canción de Joan Manuel Serrat. Espero no herir susceptibilidades, pero, por otra parte, allá de quienes se sientan aludidos:


Una de piratas

Todos los piratas tienen
un temible bergantín,
con diez cañones por banda
y medio plano de un botín,
que enterraron a la orilla
de una playa en las Antillas.

Todos los piratas tienen
un lorito que habla en francés,
al que relatan el glosario
de una historia que no es
la que cuentan del corsario.
Ni tampoco lo contrario.

Por un quítame esas pajas te pasan por la quilla.
Pero en el fondo son unos sentimentales,
que se graban en la piel
a la reina del burdel
y se la llevan puesta a recorrer los mares.

Marchando una de piratas...
Larga vida y gloria eterna.
Para hincarles de rodillas
hay que cortarles las piernas.

Todos los piratas tienen
atropellos que aclarar,
deudas pendientes y asuntos
de los que mejor no hablar.
Se beben la vida de un trago
y se ríen con descaro.

Hasta que un día, temblando
en la popa de un velero,
la encuentran, y traicionando
la ley del filibustero,
no reclaman el rescate
y rehuyen el combate.

Cuando los piratas son hombres enamorados
de una piel que huele a jazmines, rompen promesas
con sus hermanos de ayer
y huyen al amanecer
rumbo a un puerto
que aún no ha puesto precio a su cabeza.

Marchando una de piratas...
Nadie doblegó su espada
y bastó una mujer hermosa
para cortarles las alas.

No hay historia de piratas
que tenga un final feliz.
Ni ellos ni la censura
lo podían permitir.
Por la espalda, en una esquina,
gente a sueldo los asesina.

Joan Manuel Serrat

jueves, mayo 25, 2006

Un muffin de manzana

El espíritu de esta nota es retomar la idea gastronómica que, hasta ahora, no había aparecido en el blog.
En primer lugar me gustaría decir que, simplemente, soy un escritor que cocina: he tomado cierta afición por los panes rápidos, entre ellos los muffins (al estilo americano, como nuestros ponquecitos) y al menos una vez a la semana cocino para tener para las meriendas.
Comparo la cocina y la escritura a partir de aquella famosa frase de Poe: "el efecto lo es todo". En ambas artes uno puede conocer los sabores y efectos de los ingredientes (que podríamos llamar canela y metáfora, suspenso y nuez moscada, por ejemplo) de manera individual, pero siempre es un reto la combinación. En la imaginación surge un sabor específico, un sabor "meta" y uno selecciona los ingredientes, calcula sus medidas, comienza a mezclarlos y espera impaciente para saber el resultado.
Después de algunos minutos de horno uno puede dar un mordisco y decidir: tal vez quedó satisfecho, tal vez no tanto, pero, en el peor de los casos, casi siempre queda el deseo de volver a intentarlo hasta lograr el sabor buscado.
Primero que todo, acá tienen una imagen del muffin que resultará de esta receta (que, por cierto, es original y, para los escépticos: sí, funciona en casa):














Se necesitarán:
2 tazas de harina integral
2 cucharaditas de bicarbonato de sodio
1 cucharadita de canela en polvo
3/4 de taza de azúcar integral
1 cucharada de leche descremada en polvo
1 taza de agua
1 huevo
1 manzana grande rallada
1/2 taza de pasitas

Primero se calienta el horno a unos 375° F y se prepara un molde para muffins de 6 unidades grandes (1/2 taza. La idea es colocar simplemente algo de aceite pero sólo en el fondo del molde para que le muffin pueda crecer.
Luego se coloca en un recipiente el agua, se le añade el huevo ligeramente batido y se mezclan hasta homogeneizar. Se toma un colador y se comienzan a agregar los ingredientes secos, tamizándolos previamente: la harina, el bicarbonato, la canela, el azúcar y la leche descremada.
Se revuelve hasta que toda la mezcla esté humedecida: no importa si quedan algunos grumos, desaparecerán al momento de la cocción. Finalmente, se agregan a la mezcla las pasas y la manzana rallada, se revuelve sólo hasta que se incorporen.
Se comienza a distribuir la mezcla en cada una de las tazas del molde. Se lleva al horno durante media hora o hasta que al introducir un mondadientes (palillo) en el centro del muffin éste salga seco.
Al sacarlos del horno se deben dejar enfriar unos cinco minutos, se desmoldan y se les deja reposar algo más en una rejilla o en un paño poroso.
Se pueden comer calientes, recién salidos del horno, pero a mí me gusta que descansen unas 12 horas.
Si no los quieren integrales basta con cambiar por harina normal y azúcar refinada, aunque hay que bajar la cantidad de azúcar a 1/2 taza.
Más fácil no puede ser, así que aquí queda la receta... ¿será que alguien se anima?

miércoles, mayo 24, 2006

Una inquietud: Ser o no ser, aquí, en cualquiera o en ninguna parte...










El lunes tuve la oportunidad de leer en la "Semana de la Nueva Narrativa Urbana", un evento organizado por el Pen Club venezolano. La idea es que, durante cada día de esta semana en las instalaciones del Centro Cultural Chacao, tres narradores, representantes de una nueva aproximación a la literatura en Venezuela, lean textos inéditos, los cuales serán recogidos en el libro "De la urbe para el orbe", a ser bautizado el próximo viernes 26 de mayo a las 8:30 pm.
Me tocó compartir con Rodrigo Blanco Calderón y Javier Miranda-Luque, quienes leyeron, respectivamente, los relatos "Los invencibles" y "Abstracto bilingüe". Antonio López Ortega tuvo a su cargo el comentario de las tres obras (yo leí mi relato "Virginia y tú") pero hubo un aspecto que no tocó y esta mañana, escuchando la noticia en la radio de los minuciosos operativos que la Unión Europea despliega en África del Norte para frenar la inmigración ilegal, recordé: el desarraigo.
Quienes hablan con mucha tranquilidad de lo "inútiles que son las fronteras" seguramente no nacieron en el planeta Tierra.
Uno puede sentirse "ciudadano del mundo", "bien en cualquier parte", pero hay ciertos vínculos -sustentados en esta persistente manía que tenemos como humanos de aferrarnos a los hábitos- que no podemos deshacer con nuestro lugar de nacimiento o aquél donde hayamos pasado una significativa porción de nuestra vida.
Sin embargo, agobiados por los problemas cada vez más tangibles y menos románticos que el amor por la tierra, hay personas que encuentran como única respuesta escapar: escapar allí donde creen que "la grama es más verde", donde encontrarán oportunidades, donde podrán tener una vida mínimamente apacible.
Somos nosotros, los latinoamericanos, son los africanos, son los parientes pobres dentro de Europa (en gran parte Europa del este), a quienes nos ha tocado esta mano mezquina en la partida de naipes del bienestar mundial y deseamos refugiarnos en España, en Estados Unidos, en Francia, por nombrar sólo algunos de los destinos.
El venezolano, durante mucho tiempo, gozó de la fama del arraigo. ¿Quién querría irse de un país petromillonario, con diferentes climas, con buena calidad de vida? Nadie. Sin embargo, el deterioro económico y social de las últimas décadas y el desbarajuste revolucionario ha cambiado esa situación.
Y ahora el venezolano, en gran medida, es ese que encarnaron los personajes de Blanco, Miranda-Luque y yo. El lugar que llamaba su casa, su patria, lo amenaza. Si no se ha ido y ya sufre las penurias de la lejanía, está pensando seriamente en hacerlo. Pero, más crudamente, aunque no se haya ido, ya su mente, sus intereses, su corazón está en otra parte. Mientras el cuerpo sigue ejecutando rutinas sin sustancia en una inmensa prisión cuyos barrotes son las fronteras.
Sinceramente, al terminar ir escuchando los tres relatos fue ir asimilando la epifanía. ¿Los sentimientos? Satisfacción intelectual por la observación pero cierto dolor por este nuevo venezolano que, entre todos, estamos engendrando.
Desde 2001 no he vuelto a Miami, no he podido ve rlo que tantos cuentas, la forma como se ha convertido en una "sucursal" de Venezuela. Me gustaría ir y verlo. Y regresar.
Sé que toda esta vida, esta humanidad, esta mente es pasajera. Pero para mí las coordenadas geográficas del lugar donde puedo "ser" me preocupan. Y si las pierdo o las cambio quisiera que fuera un proceso íntegramente voluntario.
Y ya me tendrán escribiendo sobre eso.

martes, mayo 23, 2006

Una muestra de hipocresía: Barry Bonds, los esteroides y la jeringa

Leo que, en medio de la larga espera que tuvo que sufrir Barry Bonds para lograr igualar el record de 714 jonrones de Babe Ruth, no sólo fue una cuestión de gritos y pancartas insultantes sino que incluyó un espectáculo bastante patético: un niño se apareció en uno de los estadios disfrazado de jeringa.
¿El motivo? Tratar de denunciar nuevamente el caso de esteroides en el cual está involucrado el jardinero d elos Gigantes de San Francisco.
Así como cuando en la televisión salen pequeños besando a un funcionario gubernamental o político en campaña, no es difícil ver que hay una mano adulta detrás de esto.
Para un niño, afortunadamente, el concepto de "esteroides" y del Bonds como un "tramposo" no es ni tan claro ni tan sofisticado como el de un adulto. Entonces, al parecer, estamos frente a un veredadero acto de cobardía.
Este adulto, seguramente padre, no se atreve a llevar sus consignas e insultos o piensa que estos no serán suficientes y somete al niño a este ridículo espectáculo. Guardando las distancias, el episodio me hizo recordar las historias de los padres que llevaban a sus hijos al burdel "para que se volvieran hombres".
A Dios gracias, al niño lo obligaron a quitarse el disfraz antes de ocupar su asiento. Pese a que seguramente no fue la intención inicial del guardia encargado de esa tarea, temrinó por hacerle un enorme favor a la ingenuidad del niño.
Con seguridad el padre siguió gritando como desaforado en cada turno de Bonds cosas como "tramposo", "drogado", entre otros. Casi con seguridad lo hizo con las misma fuerza con la que celebró los jonrones 79 al 73 con los cuales Bonds superó la marca de todos los tiempos para una temporada...