viernes, septiembre 22, 2006

Un análisis de Luis Pedro España sobre los ataques a las actividades de Manuel Rosales en las barriadas populares

"¿Son planificados o espontáneos los desmanes que de cuando en cuando se producen en las zonas populares cuando la política y las pasiones hacen cortocircuito?

Luis Pedro España, sociólogo y profesor de la UCAB, estudioso del tema de la pobreza, tiene dos cosas claras. En primer lugar, es una circunstancia de origen urbano que tiene lugar, ante todo, en los barrios Caracas. Lo que ocurre en ellos suele solapar un universo como el de los sectores populares, que tiene un radio más amplio y que presenta una complejidad mucho mayor.

En segundo lugar, para España es evidente que estos actos de sabotaje son planificados. "Puede que no los planifique el Comando Táctico del MVR, pero es obvio que los dirigentes locales tienen autonomía para lo que sea. Necesitan demos trar que organizan a sus partidarios y que los movilizan. Es un asunto que da galones: ser restados y dar demostraciones de compromiso. Para un candidato a integrar una Junta Parroquial, por ejemplo, ese un excelente pergamino".

Es un razonamiento que tiene respaldo en un hecho constatable: el alto gobierno y la dirigencia del chavismo lamenta lo que sucede y "condena la violencia", pero jamás hace llamados de atención severos a sus seguidores para que dejen de hacer lo que hacen. La abstracción según la cual la culpa de lo que pasa la tienen los visitantes del barrio por "provocadores" plantea una curiosa ecuación según la cual es la cola la que mueve al perro. "Un dirigente que hace esto sabe que no lo van a regañar por lanzarle piedras a Manuel Rosales"." (el nacional)